Empresas de todo el mundo ya están planificando para el futuro cercano y considerando la «nueva normalidad». El gran interrogante es ¿Cómo cambiará la industria de la seguridad en un mundo post Covid-19?

Para encarar su respuesta, hay que observar cómo la sociedad se ha adaptado y cambiado durante la pandemia y cuáles de estos cambios continuarán siendo percibidos como normales, incluso cuando el Covid ya no sea un peligro claro y presente.

Los cambios más significativos se pueden clasificar en tres grupos: hábitos sociales, impactos económicos y tendencias de seguridad.

Hábitos sociales

  • Mayor foco en la protección de la salud y la conciencia social.
  • Reducción de los viajes
  • Atención continua en la prevención y control de infecciones.
  • La aceptación de la tecnología para compras remotas, teletrabajo, entretenimiento, entre otros.

Impactos económicos

  • La mayoría de los sectores de ocio y cultura redujeron sus ingresos y han comenzado a reducir costos.
  • Aumento del desempleo, y a consecuencia el posible aumento de la delincuencia. Un punto clave a resolver desde la seguridad.
  • Movimiento de bienes y servicios dentro de las fronteras. El abastecimiento de productos locales, cobra alta importancia y por ende la importancia de protegerlos.

Tendencias de seguridad

La tendencia a quedarse en casa, evitar lugares concurridos y minimizar el contacto físico obligaran al uso de:

  • Conteo automático de clientes.
  • El control de flujo de circulación vial.
  • Reconocimiento facial.
  • Control y detección de fiebre.
  • Sistemas de monitoreo remoto, por robótica y drones.

Esta automatización, su uso remoto y la digitalización harán que los Centros de Operaciones de Riesgos desempeñen un papel clave, pues en ellos se centraliza la información y donde los operadores inteligentes (humanos respaldados por inteligencia artificial) actuarán sobre la información recibida.

El futuro de la seguridad

A raíz de las nuevas amenazas post pandemia será más importante que nunca el análisis de las amenazas y los riesgos y, que esto sea parte del plan de mejora continua de cada empresa. En la industria de la seguridad, será prioritario proporcionar soluciones ágiles y eficientes. Los profesionales del rubro deberán tener la capacidad de establecer nuevos modelos operativos respaldados por los procesos y el gerenciamiento adecuados.

El cliente no deberá optar por soluciones simples y “baratas” sino en las más eficaces, aunque ellas no siempre sean las más económicas ya que lo que se busca es no comprometer los activos. Con estas observaciones podemos vislumbrar cuál puede ser la nueva normalidad para la seguridad.

Usted puede anticiparse a estos cambios, no dude en contactarnos para conocer cómo adaptarse a estas «nuevas prácticas» que afectarán sus necesidades de seguridad. Para mayor información contáctese con LatinRisk.